Vacaciones, menuda palabra, tan solo con oírla nos dan ganas de sonreír, dejar apartado el puesto de trabajo durante unos merecidos días y disfrutar de algún viaje con nuestros seres queridos. No obstante, antes de aventurarte por carretera hacia algún lugar remoto, debes de saber que las vacaciones en familia requieren de una planificación rigurosa para evitar cualquier posible inconveniente. ¡Apunta! Sigue leyendo para conocer cinco consejos que te garantizarán unas vacaciones de ensueño.

 

Comenzar el viaje lo más temprano posible

¿Madrugar estando de vacaciones? Al igual que tú, reconozco que ambos conceptos simplemente no casan. Sin embargo, el mejor momento para emprender un viaje por carretera es poco después del amanecer.

A la hora de realizar escapadas con niños, estos suelen mostrarse ansiosos por llegar al destino elegido. Es normal, al otro lado del horizonte se encuentra un lugar exótico y divertido para ellos, por lo que no dejarán de repetir la famosa y exasperante pregunta de “cuánto queda”. Por este motivo, salir temprano te resultará efectivo para apaciguar sus nervios por llegar ya que descansarán durante la mayor parte del trayecto para recuperar las horas de sueño perdidas.

Por otro lado, desde BMW sabemos que te gusta conducir, quizá los atascos no tanto. Madrugar es una de las estrategias más efectivas para evitar aglomeraciones por carretera, muy frecuentes en los períodos vacacionales.

Normalmente, la mayor parte de los trayectos vacacionales por carretera se producen en verano, estación en la que la población española concentra sus descansos laborales. Por nuestro clima, las altas temperaturas estivales son una certeza. Producen deshidratación y agotamiento al conductor, siendo mejor opción para él optar por conducir en las horas menos calurosas. También, cabe considerar que el hecho de viajar por la mañana nos permite planificar más estacionamientos para estirar las piernas, hidratarnos o ir al baño, algo fundamental cuando viajamos en familia con niños o personas mayores.

 

Tenerlo todo bajo control

Un consejo fundamental es tenerlo todo bien planificado si se va a viajar en familia. Conocer de antemano algunos aspectos como por qué rutas conducir, cuál será la duración de tus vacaciones o qué posibilidades de ocio encontrarás.

Parece obvio, pero lo primero que debes decidir es a dónde queréis ir. Algunas familias alquilan un apartamento vacacional en la costa o en la montaña sin informarse de las particularidades del entorno. Por norma general, los destinos cuyo atractivo reside en la naturaleza de sus paisajes son un acierto asegurado para quienes viajan con la familia.

No te olvides de los gastos. Cuando uno está de vacaciones siempre le apetece vivir nuevas experiencias y exprimir cada minuto de ocio, sin escatimar. Por esta razón, te aconsejo realizar una investigación previa que te ayude a decidir cuál es el destino que mejor se amolda a tu bolsillo y expectativas.

Del mismo modo, también tienes que calcular la duración de tus vacaciones en consonancia a las actividades que desees realizar. Muchas familias no son conscientes de las posibilidades del destino elegido, por lo que se les hace corto el viaje y se quedan con ganas de más.

Cabe destacar que, aunque planifiques descansar y relajarte de todo el estrés acumulado durante el año, en una escapada en familia que se precie es aconsejable incluir actividades físicas. Los niños necesitan desfogar su energía, así que planifica salidas al parque, la playa o la montaña. Créelo, lo agradecerás a la hora de irte a la cama.

No obstante, jamás permitas que un exceso de planificación te arruine tus vacaciones. Planificar en su justa medida es necesario, aunque no te obsesiones con que todo vaya a salir perfecto. Improvisar un poco también es divertido.

 

Disfrutad del trayecto

Ha pasado ya un tiempo desde la última vez que nos fuimos de vacaciones. Los adultos queremos dejar de lado la oficina y los más pequeños el colegio o instituto. Queremos llegar a nuestro destino, deshacer las maletas y disfrutar.

En este consejo te voy a animar a vivir el presente. Los kilómetros que recorremos en nuestro vehículo son también parte de nuestras vacaciones, ¿por qué no disfrutarlos?

Para entretener a los niños no hace falta demasiado. Una excelente opción es la de cantar en el coche, ya sea interpretando las melodías de la emisora o a capela nuestras canciones favoritas.

Otra alternativa es jugar al clásico juego familiar del “Veo-veo”. De hecho, seguramente ya hayas jugado cuando eras un crío. Buscar y señalar aquello que nos muestra el paisaje entretiene a los más pequeños de la casa y disminuye la sensación de fatiga del conductor.

Aunque hay que recordar que nuestro mundo ha evolucionado. Los vehículos son cada vez más confortables y traen consigo todo tipo de equipamientos y accesorios. Los BMW Serie 3 Berlina son un ejemplo de ello. Podemos disfrutar de su tecnología incorporada para amenizar el viaje viendo series y películas, ¡una experiencia mejor incluso que una sala de cine!

También, otro clásico que suele funcionar para mantener en calma a los niños durante los trayectos en coche es dejarles entretenerse con sus juguetes favoritos. Son una mina de imaginación, tanto tu pareja como tú seréis testigos de sus mundos de fantasía. Aun así, está claro que este método depende de la edad. En procesos madurativos superiores, lo que nunca falla es dejarles estar con un móvil que cuente con conexión a Internet.

Y si ninguna de estas técnicas sirve, recuerda que la imaginación es tu mejor herramienta. Prueba a entrenar tus dotes narrativas contando una cautivadora historia sobre el lugar al que os dirijáis. Estudia antes de viajar las anécdotas más características de vuestro destino o, por qué no, ¡invéntatelas!

 

Desconecta digitalmente (de verdad)

A lo largo del año es común responder llamadas, contestar correos urgentes y, en definitiva, estar atentos de todas aquellas obligaciones que nos incumben, principalmente las relacionadas con nuestra vida laboral y social. Desconectar en vacaciones parece sencillo, pero bien sabemos que no lo es.

Antes de disfrutar de tus vacaciones, sería conveniente que anticipases la mayor cantidad de trabajo posible. Responde a los correos pendientes, porque si no te perseguirán. Los clientes y los jefes no entienden de vacaciones.

En cuanto a los niños, nuestra sociedad actual parece esclavizada por las pantallas de los dispositivos móviles. De hecho, un análisis de Nielsen Ibone concluyó que los jóvenes, de entre 15 y 29 años de edad, pasan unas tres horas diarias en redes sociales como Youtube, Instagram, Twitter o WhatsApp. El tiempo tanto en vacaciones como en nuestra cotidianidad es oro, procura limitar los accesos a Internet a unos horarios determinados.

Otro asunto a tratar es el de subir las típicas fotos de postureo a redes sociales. No es aconsejable mostrar que estás de vacaciones con tus hijos hasta haber vuelto a casa. En cada período vacacional se incrementan los delitos de robo en hogares que se encontraban deshabitados, aprovechando la información que los inquilinos colgaban en sus redes sociales.

Sin embargo, reconocemos que en ocasiones esta desconexión digital es imposible. Para ello, debes delimitar los horarios de trabajo mediante la técnica inside vs outside. Establece un orden en tu jornada fuera de la oficina, prueba a solo realizar tareas como responder correos cuando estés en el hotel o apartamento. El resto del tiempo pásalo en familia, porque si trabajas aun estando de vacaciones, te mereces un monumento.

 

Cuidado con los excesos

El reconocido filósofo Aristóteles decía que en el término medio se encuentra la virtud. En vacaciones tendemos a perder el autocontrol: copiosas comidas, rutas inabarcables, gastos desmedidos, etc. No te olvides de que viajas en familia, y más pronto que tarde tocará retomar la rutina.

En el caso de la comida, es habitual que en las vacaciones con niños estos demanden bebidas azucaradas, comidas calóricas o infinitud de helados durante las vacaciones. No pasa nada por consentirlos de vez en cuando, pero no dejes que se acostumbren a los hábitos de vida no saludables. Intenta llevar contigo snacks de fibra y piezas de fruta. Y no lo olvides, los niños aprenden de lo que ven, tienes que comulgar con el ejemplo.

En vacaciones, los días se alargan más de la cuenta. Las sobremesas tras las cenas son una norma no escrita, lo que hace que nos vayamos a dormir de madrugada. Los niños no soportan este ritmo y al día siguiente están demasiado cansados como para aprovechar la mañana. Procura mantener el horario habitual pese a estar de vacaciones.

Por otro lado, antes hemos hablado de la importancia de planificar nuestras vacaciones. Debemos ser conscientes de que los días, al menos por ahora, solo disponen de veinticuatro horas. Configurar demasiados eventos puede resultar contraproducente tanto para mayores como para niños pequeños, ya que una saturación de actividades resulta poco estimulante. Rígete por una norma básica: no planificar más de un evento al día. Toda tu familia lo agradecerá porque, en estas ocasiones, menos es más.

En definitiva, estos han sido cinco consejos de gran utilidad para aplicarlos en tus próximas vacaciones en familia. ¡No te olvides de visitar nuestro blog para informarte de más consejos de calidad!